En los años 60, se desató en China la llamada revolución cultural, antecedida por la ruptura chino-soviética. Fue la época de la guerra de Vietnam, de la revolución cultural en China y el libro rojo con citas de los textos de Mao Tse-tung. Durante esos años, los partidos comunistas se dividieron entre moscovitas y pequineses. En el Perú, nacieron Patria Roja, Bandera Roja y el Partido Comunista por el Sendero Luminoso. Los “maoístas” peruanos, con su librito rojo, en los ambientes universitarios, leían y repetían con fervor, como si estuvieran en medio de la revolución cultural china, las “citas” del presidente Mao, que la llamada “banda de los cuatro” en China, había convertido en dogma.
Cuarenta años después, 2012, China es un gran aliado y competidor económico de los Estados Unidos. El gigante asiático tiene más de 30 años de crecimiento económico con la presencia de las más grandes empresas de Estados Unidos, Europa y Japón. Vietnam -que derrotó al “imperialismo norteamericano”- hoy es un aliado de Estados Unidos, con el que realiza la limpieza del “agente naranja” de las tierras vietnamitas, peligroso químico lanzado a su territorio, en el desesperado intento americano de ganar la guerra.
Cayó el muro de Berlín, China desarrolla el capitalismo, Vietnam trabaja con Estados Unidos. Rusia impulsa la economía de mercado. Pero mientras en el mundo los ex comunistas abrazan el capitalismo, en el Perú, siguen actuando como en los años 60. Gregorio Santos del Partido Comunista-Patria Roja, el castrista Wilfredo Saavedra del MRTA, Idelso Hernández del “Frente de Defensa” –también de Patria Roja- sumado al mesiánico ex sacerdote Marco Arana de Tierra y Libertad, forman la nueva banda de los cuatro.
Santos, soberbio, se burla de Juan Jiménez, Presidente del Consejo de Ministros. A los pocos minutos de la juramentación del nuevo Consejo de Ministros, declaró que Conga no va y, ahora, desafiando las leyes, convoca a un paro de 48 horas y añade que con o sin Estado de Emergencia, Yanacocha se debe ir de Cajamarca. Mientras tanto el gobierno “estudia” la posibilidad de levantar el Estado de Emergencia y casi le ruega a Santos que ofrezca algunas señales para levantarlo. Cuanto más débil el gobierno más radical se torna Santos.
¿Por qué el Gobierno es tan débil con Patria Roja? ¿Existe alguna alianza en torno a la Ley de Desarrollo Docente? ¿Quién manda en el Perú, el Gobierno Regional de Cajamarca o el Gobierno Nacional? El Gobierno de Ollanta Humala tiene que hacer respetar la Constitución y las leyes. Sabemos lo que quiere Santos pero no está claro, en los hechos, lo que quiere el gobierno. ¿Cómo se puede calificar al sabotaje a la inversión en medio de una Cajamarca pobre, en una crisis económica internacional que empieza a golpear al Perú que luego de más de 20 años de enormes esfuerzos y crecimiento económico genera ingresos, empleo y permite la inclusión social, sacando a millones de personas de la pobreza? Eso, el Gobierno y los peruanos no lo podemos permitir.